Las reacciones de los jugadores argentinos en redes luego de ser campeones
Prendió la dinamita: Dibu Martínez asumió otra vez el papel de héroe
FIFA –
Emiliano Martínez acaba de sacar una captura de pantalla con su celular . Es un trámite necesario porque, por más que pierda el tweet, su cerebro ya lo guardó para siempre: lo dejó como combustible para todo lo que vendrá después . En la captura de pantalla, un Louis Van Gaal que había concretado distintos campos de entrenamiento con sus arqueros para perfeccionar su rendimiento y evitar que se repita el escenario de su eliminación en Brasil 2014 ante el mismo rival, vaticina: “Si tenemos que llegar a los penales , creo que quizás ahora estemos en ventaja ”.
Dibu tomó nota. Los cuartos de final, no se equivocó Van Gaal, fueron una partida de ajedrez con un desenlace dramático en el que Países Bajos consiguió un empate agónico para forzar la prórroga. Y los penales fueron el método de definición tras 120 minutos de paridad. El experimentado entrenador de 71, sabio y estudioso, había pergeñado un plan hasta la obsesión y nada podía fallar en sus papeles pero había un factor que el neerlandés no podía manejar: a Martínez y su motivación .
“Hablaron muchas boludeces antes del partido. El técnico decía que eran candidatos si iban a penales y que se querían sacar la bronca del 2014. El técnico lo dijo, yo lo vi y le saqué captura y me lo guardé. Se lo mostré a Martín (Tocalli, entrenador de arqueros) ya mi consejero y les dije ‘prendió la dinamita’. Tenía guardadas las palabras de Van Gaal en el teléfono y las usaba como motivación todos los días antes del partido ”. Y la dinamita prendió: Martínez desplegó su show habitual, desempolvó los juegos mentales que había guardado después de la semifinal de la última Copa América ante Colombia, y se lució con sus atajadas ante Virgil Van Dijk y Steven Berghuis para sepultar la revancha Oranje.
Martínez es el último eslabón en la dinastía de arqueros argentinos que se lucieron en tandas de penales mundialistas con Argentina. Heredero de Sergio Goycochea, Carlos Roa y Sergio Romero, Dibu es una garantía bajo los tres palos y acumula cifras de especialista desde los doce pasos: detuvo tres remates ante Colombia y dos ante Países Bajos en Catar. En ambas definiciones consumó su revancha personal apelando a juegos mentales para desenfocar a los pateadores.
Del «mirá que te como» que le lanzó al colombiano Yerry Mina al bailoteo sobre la línea de cal para distraer a Virgil Van Dijk solo pasó poco más de un año . Todo fue arrepentido en su carrera: su inesperada aparición en la escena global tras la lesión de Bernd Leno y su consolidación como figura del Arsenal de Mikel Arteta después de años de frustrantes cesiones, su venta al Aston Villa por cifras millonarias y su reconocimiento como uno de los mejores porteros de la Premier League, su irrupción nacional y su consolidación como pilar fundacional de La Scaloneta, todo fue rápido y abrupto.
“ Algo que aprendí del fútbol -confiesa- es que se habla en la cancha . Ellos hablaron mucho antes del partido y eso me dio mucha energia. Vos no podes hablar tanto antes de los partidos pretender salir ganando, eso me hizo más fuerte y después del partido se lo dije. Solo pensé en que les iba a callar la boca y gracias a Dios pude atajar dos penales, pero podrían haber sido más”.
Otra vez héroe, le tocó ver desde un costado cómo Lautaro Martínez sentenciaba la serie ante Países Bajos. Tras la conquista del Toro, se desplomó en su lugar mientras todos sus compañeros corrían en sentido opuesto a su ubicación para buscar al goleador. Todos salvo uno: Messi fue a buscarlo para agradecerle otra intervención milagrosa a quien ya había definido como uno de los «mejores arqueros del mundo». Fue su segunda gran postal en su travesía catarí tras la atajada in extremis frente a Garang Kuol en la última jugada del cruce de octavos ante Australia: «Sabemos que cuando vamos a los penales, tenemos ventaja con él «, ponderó el 10 a su héroe .