Las reacciones de los jugadores argentinos en redes luego de ser campeones
La madre de todos los milagros saudíes
FIFA-
FIFA+ analiza el cenit futbolístico de Arabia Saudita: una victoria por 2-1 sobre Argentina en Qatar 2022.
-
Arabia Saudí apareció en Argentina en su primer encuentro del Grupo C
-
Se trata de una de las mayores campanadas en la historia de la Copa Mundial de la FIFA
-
FIFA+ analiza esta hazaña futbolística para los Halcones Verdes
Said Al Owairan describió su intrépido gol contra Bélgica en Estados Unidos 1994 como “un milagro saudí”. Y lo fue… El mediapunta se cruzó a toda velocidad el Robert F. Kennedy Memorial Stadium, dejando atrás a los players rivales con un eslalon desde su propio campo hasta el área belga, antes de incrustar el balón en la parte alta de la red de la portería defendida nada menos que por Michel Preud’homme, que acabaría llevándose el Premio Lev Yashin en ese mismo campeonato. Pero asombrosamente, su golazo ya no encabeza la lista de milagros futbolísticos saudíes. Hoy martes, un suceso sobrenatural de 90 minutos destronó a esos 10 segundos de pura genialidad.
A priori, Arabia Saudí afrontaba su primer encuentro del Grupo C como una clarísima víctima potencial. Argentina tuvo 36 encuentros invictos, y sólo necesitaba uno más para igualar el récord mundial de Italia. Con una zaga que había mantenido a cero su arco en 13 de sus últimos 15 partidos, y un ataque que contaba con Ángel Di María, Lautaro Martínez y Lionel Messi, eso se dio por hecho. Además, las selecciones asiáticas habían sido arrolladas en sus dos primeros compromisos en Catar 2022, con la cómoda victoria de Ecuador sobre el país anfitrión y el contundente 6-2 de Inglaterra a la RI de Irán. De hecho, en los primeros compases no pareció tanto una cuestión de si ganaría Argentina, sino de por cuántos goles de diferencia lo haría. Lionel Messi confirmó el 1-0 de penal en el minuto 10, y el combinado de Lionel Scaloni vio cómo le anulaban tres goles por fuera de juego. Los saudíes, sin embargo, no agacharon la cabeza. La charla al descanso de su entrenador Hervé Renard hizo maravillas, y regresó al césped optimistas y expectantes. A los pocos minutos, Saleh Al Shehri empató. Poco después, tras haber retenido mágicamente el balón frente a tres jugadores argentinos, Salem Al Dawsari marcó el 2-1. .
A partir de ahí, los Halcones Verdes lo fiaron todo a la épica defensiva. Ali Al Bulaihi y Hassan Al Tambakti fueron sendas rocas en el eje de la retaguardia, mientras que el arquero Mohammed Al Owais realizó varias paradas extraordinarias. Cuando sonó el pitido final, Arabia Saudí había rubricado una de las mayores sorpresas en la historia de los Mundiales; una campanada que les otorga grandes opciones de acceso a la segunda fase por primera vez desde 1994.
Italia había conservado su récord mundial. Said Al Owairan había perdido su preeminencia. Pero seguramente no le importe lo más mínimo. Hoy fuimos testigos no solamente del milagro de los Halcones Verdes, sino también del momento de mayor orgullo para cualquier saudí.