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De Senegal a Marruecos: así ha ido correspondiendo África a la histórica decisión de la FIFA
FIFA –
De vez en cuando, África ha vivido historias felices en las Copas Mundiales de la FIFA. Estas grandes actuaciones se vieron favorecidas por una decisión tomada hace más de 24 años, cuando la FIFA decidió aumentar a cinco el número de selecciones africanas que podían clasificarse para la cita mundialista. Anteriormente, la presencia africana se limitaba a una plaza desde 1970. Luego se aumentó a dos en 1982, una decisión que se vio refrendada por los buenos resultados cosechados por Argelia y Marruecos, que derrotaron, respectivamente, a Alemania en 1982 y a Portugal en 1986. Es más, los Leones del Atlas se clasificaron por primera vez para la segunda fase en México 1986. El número se incrementó a tres plazas en 1994, después de que Camerún sorprendiera a todos con su gran nivel frente a las grandes selecciones en Italia 1990. Finalmente, se decidió un último aumento hasta cinco, tras la buena actuación de Nigeria en 1994 (luego refrendada en 1998). Esta decisión tuvo una gran respuesta por parte de las selecciones africanas, que han jugado un buen papel en todas las últimas ediciones.
El buen rendimiento de las estrellas del continente africano antes de 1998
Antes de que empezase a haber un quinteto africano en 1998, varias selecciones demostraron que podían llegar lejos. Su talento inspiró a muchos en el Continente Madre; empezando por lo que hizo Argelia al imponerse a la República Federal de Alemania en España 1982; o Marruecos al clasificarse para octavos de final en 1986. Y por supuesto, también Camerún, que alcanzó los cuartos de final en Italia 1990; y Nigeria, que superó la fase de grupos en los Mundiales de 1994 y 1998.
El verdadero pistoletazo de salida fue el gran papel que jugaron los cameruneses, liderados por Roger Milla. En tierras italianas, los Leones indomables ganaron a Argentina en la fase de grupos y eliminaron a Colombia en octavos de final. En cuartos, cayeron contra Inglaterra por la mínima. Era el mejor resultado jamás obtenido por una selección africana. En Estados Unidos 1994, una Nigeria con grandes estrellas demostró también que tenía un gran equipo, aunque fue eliminada por Italia en octavos tras jugar la prórroga. En todo caso, fue una prueba más de que los países africanos pueden competir con los mejores del mundo.
De Senegal en 2002 a Marruecos en 2022: la confirmación
Tras esa primera oleada de brillantes actuaciones, los combinados de África confirmaron su capacidad para protagonizar epopeyas mundialistas. Ocurrió en 2002 con Senegal, que, pese a su condición de debutante, venció en el partido inaugural a la defensora del título, Francia.
Luego empató con Dinamarca, y también con Uruguay en un partido apasionante (3-3). En la segunda fase, los Leones de la Teranga derrotaron a Suecia con dos goles de Henri Camara, antes de caer contra Turquía en cuartos de final. Las historias felices continuaron con Ghana, que se clasificó para octavos en Alemania 2006 antes de sucumbir ante la poderosa Brasil. Y posteriormente, cayó en la tanda de penaltis ante Uruguay en los cuartos de final de Sudáfrica 2010, tras haber rozado el pase a semifinales. Argelia también logró superar la fase de grupos en Brasil 2014, antes de caer en octavos contra Alemania tras disputar la prórroga.
Marruecos confirma que África merecía plazas adicionales
Y ahora, la selección marroquí ha conseguido hacer realidad el sueño de un continente entero. Los Leones del Atlas están felices por haber alcanzado las semifinales del Mundial de Catar, y por haber puesto de manifiesto la capacidad de los africanos para brillar incluso ante las selecciones europeas del máximo nivel.
Los resultados obtenidos por las selecciones africanas en las últimas citas mundialistas marcaron el camino a seguir; especialmente por haber superado a grandes rivales. Por ejemplo, Ghana tuvo que vencer en 2010 a Serbia y Estados Unidos. El camino de Marruecos hasta las semifinales en Catar fue aún más arduo, enfrentándose a rivales de la talla de Croacia, Bélgica, España y Portugal.
¿Qué futuro le espera al fútbol africano?
Está previsto que en el Mundial de 2026 compitan 48 selecciones, con el consiguiente aumento de plazas para varios continentes. Asia contará con 8 cupos en la fase final, más otro posible adicional a través de una repesca intercontinental. La zona de Norte, Centroamérica y el Caribe dispondrá de 6 plazas directas y otras 2 posibles mediante repesca. A su vez, Sudamérica obtendrá 6 billetes directos y otro cupo adicional para el repechaje. Oceanía tendrá 1 billete directo y otro adicional para la repesca, mientras que Europa obtendrá 16 plazas directas. En cuanto a África, con 9 cupos más otro posible por repechaje, tendrá más oportunidades para confirmar su valía en futuras Copas Mundiales, y seguir protagonizando historias inspiradoras sobre el terreno de juego.